Tener un hijo te cambia la vida.
No en el sentido malo, siempre podrás hacer lo que te gusta (siempre teniendo
en cuenta que los primeros meses deben ser de dedicación al 100%) porque ser
feliz hace que él también sea más feliz. Te cambia la vida en cuanto a
prioridades.
Cuando me dijeron: “tienes un neuroma
de 3,5 cm” mi reacción no ha sido asustarme por mi misma, tener miedo por lo
que podría pasarme etc. ¡No! Mi reacción ha sido: “mierda! ¿Y Ahora qué hago
con el peque? ¿Cuándo me tendrán que operar como lo hará para estar sin su
madre? ¿Cómo voy hacerlo con la teta?”. Esta ha sido mi reacción, aunque os
parezca raro, porque al fin y al cabo siempre hay soluciones a todo.
¿Qué hago con el peque? Pues ya cuidaran
de él los abuelos, no hay problema.
¿Cuándo me tendrán que operar
como lo hará para estar sin su madre? Bueno… se tendrá que aguantar unos días,
no hay más.
¿Cómo voy hacerlo con la teta?
Como me dicen muchos, ya está criado. Se la quitó y le doy biberón.
Pero no. Para mí no es tan
sencillo. Sobre su cuidado estoy más tranquila sabiendo que mi madre estará con
él. Serán días duros: la pobre ya no ha pringado lo suficiente con 4 bebes como
para seguir pringando con un quinto… y el peque estará siempre alerta y
nervioso, cuando empezarán a pasar las horas y su mamá no estará allí quizás llore
mucho. Y esto me hace sentir fatal pero no puedo hacer nada para evitarlo: 10-12
horas de cirugía más 1-2 días en la UCI se los tendrá que comer con patatas. Y
yo también.
El tema teta… cada vez que se
habla de lactancia materna en el grupo El médico de mi hij@
se lía parda.
El médico de mi hij@ es un grupo abierto de Facebook creado por Jesus Martinez que proporciona ayuda y soporte a los padres sobre temas de pediatria (hay muchos buenos medicos disponibles para ayudar), crianza y educacion.
De repente las mujeres, que deberían formar un ejército compacto
para luchar contra la discriminación de género (hay aunque os digan lo
contrario), para conseguir la conciliación real, para cuidar de los hijos de
todos… pues se distribuyen en dos bandos contrapuestos: el bando de las
pro-lactancia materna y el bando de la independencia (mis tetas son libres). Y
claro… se empiezan a lanzar acusaciones por el estilo “no por no dar el pecho
soy mala madre” (cuando nadie piensa que lo seas) o “la lactancia prolongada no
significa que estoy creando un niño más dependiente”.
Nunca me he atrevido a opinar,
porque creo que cada una tiene que elegir teniendo toda la información posible
a disposición. Y una vez tomada la elección no tiene que sentirse ni culpable
ni una “super mujer”, solo una madre como muchas otras.
¿Pero sabéis que os digo? Que
este es mi blog y opino lo que quiero J.
Por esto tengo un blog. Y censuraré los comentarios si no me agradaran.
Personalmente creo que la
lactancia materna sea lo mejor para un niño en cuanto a alimento y en cuanto a
contacto, seguridad y refugio. Cuando el pequeño estaba dentro de la barriga,
se alimentaba gracias a su madre y nosotras tan tranquilas… no era para nada un
estorbo. Una vez al exterior creo que para él es muy importante seguir así, alimentándose
de nosotras… aunque en este caso sí que nos estorba. Como dije antes, la dedicación
es total. Si piensas hacer lactancia exclusiva hasta los 6 meses, vas a tener
el niño muy pegado todo el tiempo (el mío tiene mucha hambre en general y
cuando tomaba solo teta me pedía cada 2 – 3 horas máximo aunque ha llegado a
pedirme cada hora por una temporada), será muy difícil recuperar tu estilo de
vida aunque siempre puedes sacarte leche y dejársela (y esto era lo que hacía
cuando me iba a ensayo con mi grupo). Será difícil la reincorporación al
trabajo también, con esta fabulosa baja de 16 semanas que tenemos… hay gente
que consigue lactancia exclusiva y reincorporación, yo no me sentía capaz y me
pedí unos meses sin sueldo.
Y la teta no es solo alimento… no
me pongo a explicaros lo que es, se entiende mirándole la carita de perfil
mientras está enganchado a la teta. No se puede explicar con palabras. Espero
tener esta imagen grabada en mi memoria para siempre porque es una de las cosas
más bonitas que existen.
¿Y como compatibilizamos teta con
una cirugía tan larga con posterior estancia en la UCI y hospitalización larga?
Pues no lo sé. Os voy a contar lo que intentaré hacer.
Primero, estoy haciéndome una
reserva de leche, intento congelar 100ml cada día. Si no fuera suficiente se
puede complementar con leche de formula… aunque hay varias teorías, la que dice
que el niño si deja de tomar leche de su madre no hace falta que tome más
leches, la que dice 700 ml de leche de formula cada día… esto lo veremos sobre
la marcha. Si no le bastara la reserva se la ofreceremos: el decidirá si la
quiere o no.
Segundo, una vez pasado el efecto
de la anestesia y una vez fuera de la UCI podré volver a darle el pecho (si no
me darán ningún medicamento chungo… esto lo iremos comprobando en esta web www.e-lactancia.org). Solo espero mantener la producción
(nunca como en estos momentos he deseado ser vaca), el médico me ha dicho que
las enfermeras pueden ayudarme a sacarme leche para mantener la producción cuando
yo esté imposibilitada. Espero que así sea.
Tercero. Volver a pleno ritmo una
vez fuera del hospital. Esperando que todo lo anterior haya ido bien.
Solo pensar dejar forzosamente la
lactancia hace que se me encoja el corazón. A veces me pregunto “¿porque ahora?”.
Estaba siendo una lactancia feliz y ahora esto. Y no quiero quitársela… él toma
mucho menos ahora que come bien pero llega el momento que me la pide a gritos!
Yo quería que fuéramos los dos, en el futuro de forma razonada a decidir que ya
basta, no forzosamente y dejándole un vacío difícil de llenar.
Y espero que no tenga que dejar
de dársela, haré todo lo que pueda para que así sea. Todo lo que pueda.
Y sí, tengo que decir que me da
un poco de rabia el tema biberón desde el principio. No hablo de las mujeres
que no pueden dar el pecho por problemas de salud, poco apoyo, decisiones médicas
no acertadas. Hablo de aquellas (y yo he conocido unas cuantas en el curso
preparto) que desde el principio dicen “no, yo le daré el biberón que lo otro
es incómodo”, “biberón, así se levantará mi marido también” “biberón así podré
volver a mis cosas… cuantos días tengo que esperar para volver al gimnasio después
del parto” “biberón, que hay una leche con aceite de pescado que me han dicho
que es muy buena”.
Si es que me parto.
Ojala todo vaya bien y pueda
seguir viendo su carita enganchada a mi teta todo el tiempo que él quiera.
p.s. quiero hacer una mención especial a los profesionales
que han trabajado en www.e-lactancia.org.
Un aplauso para vosotros, si no hubieses estado allí hubiera dejado de dar el
pecho al niño por tomar ibuprofeno y antibiótico hace mucho tiempo. Gracias!
Me ha encantado lo que has escrito. En esta sociedad estamos acostumbrados a alabar los esfuerzos y sobre esfuerzos que hacemos en muchos aspectos como el trabajo, etc, y sin embargo todos los esfuerzos que hacemos una vez somos madres con nuestros hijos son criticados, y sobre todo el tema teta. Todo lo que es molestarse un poco más de la cuenta ya es mal visto y por supuesto muy criticado. Alucino. Como no, estos comentarios sobre el esfuerzo de más y sin valor que estamos haciendo suele venir de hombres o de mujeres que no han amamantado, en 4 años como asesora de lactancia he visto muchas pero que muchas familias y aseguro que el 100% de lo que he visto ha sido así. Yo entiendo que amamantar es un acto imposible de describir, y solo las que lo hemos hecho sabemos lo que significa para nosotras y para nuestros hijos, y ojo, no solo lo que significa como madres sino lo que significa como mujeres. Lo que más me alucina de todo es que este esfuerzo se infravalore y critique cuando estamos hablando de alimentación y salud para el bebé. Quien no quiera amamantar que no lo haga, pero que no busque continuamente justificarse y infravalorar los esfuerzos que hacemos por amamantar a nuestros hijos, esto me parece repugnante.
ResponderEliminarTengo una amiga que está en una situación parecida a la tuya y nadie la entiende, desde luego que a veces pienso que en vez de dar pasos hacia adelante vamos para atrás. Que cada una haga el esfuerzo que le de la gana y sea valorado como merece. Un abrazo y mucha suerte con la operación y con la lactancia.
Ánimo Anto!! Me parece muy bonito lo que has escrito, y creo que puede ayudar a muchas madres que como tu quieren continuar amamantando a sus niños pese a los problemas que surgen. Ya verás como todo va a salir bien!! Un abrazo fuerte! Eva
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